14 enero 2011 | By: Denebola

Lo tuyo es mío y lo mío... También

Hace poco se lo estuve comentando a una amiga, llamémosla A.

Su nivel de egoísmo llega a límites infantiles y estratosféricos, y en teoría debería comportarse como una persona adulta y comprender que, del mismo modo que ella tiene obligaciones y no está disponible las 24 horas del día para hacer lo que a los demás nos apetezca, los demás tampoco. Pero ya estamos con la misma cantinela estúpida de siempre: ella trabaja y yo no, y en su mente yo debo estar las 24 horas holgazaneando, durmiendo y yéndome de picos pardos, porque de otro modo no entiendo su actitud adolescente, no entiendo que se ponga de morros como una niña de 14 años cada vez que le digo que no puedo ir a comer con ella, o a echarme una caña. Que yo tenga 5 o 10 minutos para escribir algo aquí o en cualquier otro sitio no significa que esté tocándome las narices a 2 manos todo el día, muy al contrario. Esos 5 ó 10 minutos son mis periodos de descanso entre materia y materia durante mis 10 horas de estudio, pero para ella eso es inhumano e imposible, y no es que mi situación sea dura, sino que "yo me lo monto mal". Para ella, las horas que ella está trabajando deberían ser suficientes para mí para estudiar todo lo que tengo que estudiar, y todo lo que estudio de más, es por mi culpa por no saber organizarme mejor, así que la culpa de que no pueda pasar "media hora" echándome una caña con ella, es mía. No es capaz de entender que no es media hora, sino que son 2 horas sin contar el tiempo que pierdo yendo de propio a buscarla y volviendo a casa, y que ese tiempo para mí es precioso. Ni siquiera es capaz de darse cuenta de que ella, cuando vuelve a casa a comer, tiene la comida hecha, la compra, la colada, en fin, todo hecho, y que cuando sale por la tarde, ya no tiene ningún otro tipo de obligación y yo sí. Al margen de que no es consciente de que lo que yo estudio no es lo mismo que ir a clase como cuando estudiábamos juntas ni tengo a nadie que me lo dé explicado y desmenuzado. No. Para estar bien para estudiar 10 horas al día, necesito dormir otras 10 horas, y de ese modo, mi vida se ve reducida a obligaciones y los 4 ó 6 cigarros de descanso.

Quizás por eso se lo expliqué a A, además de desahogarme, porque ha pasado por esto mismo y comprende que además del tremendo esfuerzo físico que me supone todos los días pasarme todas esas horas estudiando, también es un esfuerzo mental, porque, francamente, los bajones de moral son muy fuertes. Incluso me sorprendió que comprendiera que somatizara todos mis nervios y mis presiones.
"Debería comprender que cada uno actúa mirando por sus intereses, y que eso no significa que seáis más o menos amigas. No debería echártelo en cara". Al fin y al cabo, ella actúa de ese modo y no permite que los demás interfiramos en sus decisiones. A veces ni siquiera admite consejos ni opiniones. Y últimamente ha adoptado la técnica del chantaje emocional, y al principio me hacía sentir hasta mal, pero ahora ya, me da igual. Y se ha dado cuenta.
Apenas quedan 2 semanas para que se vaya y he de reconocer que no sé si es por su traslado involuntario o ya es cosa mía, pero no conozco a la persona que se va, he visto una faceta manipuladora suya que ni por lo más remoto me imaginé que existiera. Y me jode decir esto, pero en cierto modo, en cuanto a estas situaciones en las que me ha estado poniendo entre la espada y la pared, me alivia que se vaya. No digo que la quiera echar de mi vida, ni mucho menos, sólo que ésta es la única forma de que pare con todo esto, de que deje de hacerme daño y de gastar nuestra amistad.

Por supuesto, la echaré de menos. Pero esque ya la echaba de menos hace muchos meses.