31 agosto 2010 | By: Denebola

¿el hábito hace al monje?

He tenido que pisar mi tan amada y a la vez odiada facultad por motivos que no me apetece contarles. Es extraño cuando pasas un tiempo sin ver un sitio y vuelves por allí... Esas paredes guardan tantos momentos de mi vida que se me hace extraño volver a ver ese edificio y que esté tan cambiado. Parece increíble que allí pasara más de 12 horas al día durante tanto tiempo.

A todos nos cuelgan una etiqueta por lo que estudiamos o de qué trabajamos.
En Zaragoza, los ingenieros eran los fiesteros, jetas y más salidos del mundo, salvo los informáticos, que por lo general eran personas tremendamente inquietas y ávidas de cualquier conocimiento (luego estaban los ingenieros frikis, ésos de los bolis y la calculadora en el bolsillo de la camisa, con gafas y la raya al lado, que daba igual de qué rama fueran), los de derecho, los pijos, los de filología, los bohemios y estravagantes, los de historia, los cantamañanas, los de economía, aburridos de día, desmadre de noche, los de LADE, los hijos de papá (estos 2 últimos, podríamos decir que se entremezclaban), y así, un largo etcétera de generalidades.
Lo cierto es que en mi clase había más hijos de papá que aburridos economistas. Cuando uno se acercaba a mi facultad, el nivel de pijerío y "oseas" se elevaban a la n-ésima potencia, y en lugar de andar por un edificio daba la impresión de estar caminando por la pasarela Cibeles. Daba bastante grima, la verdad, aunque siempre era divertido esperar a entrar en uno de los bancos y escuchar conversaciones más propias de quinceañeras adolescentes adornadas con "osea, qué fuerte me parece" o "¡qué alucine, tía! ¿En serio me lo dices?"...
Pero no sólo a los alumnos se nos encasillaba, también a los profesores. Los de econometría eran los fachas, siempre de traje y gomina, los de microeconomía, los progres, los de macroeconomía, los nacionalistas (irónico, sí) a los que podías ver en cualquier "manifa" y te venían a dar clase con la palestina y un look digno de Labordeta, los de contabilidad, unos personajillos tremendamente aburridos, cuadriculados e intransigentes, los de fiscalidad, unos dictadores y bastante amargados con jerseys de pico... Y seguiría.
Sin embargo, en mi visita de hoy, he comprobado que eso de los tópicos se ha homogeneizado, no sé muy bien si por eso de la generación Ni-Ni, o que un estereotipo ha engullido a los demás, pero ha sido cruzar la puerta, y todas las chicas se han vuelto hijas de Bershka y Mango, y todos los chicos, clones de Cristiano Ronaldo.
Se supone que cuando eliges por dónde vas a seguir estudiando, lo haces conforme a tus gustos y aptitudes, y la mía es una carrera que te exige saber un poco de todo y todo de nada, es decir, ni se puede calificar enteramente de ciencias, ni enteramente de letras, ahí estaba la gracia de la heterogeneidad de todo el que habitaba ese edificio, que cada uno éramos de nuestro padre y de nuestra madre, como suele decirse, y ahora... Son todo clones.
Mis antiguos compañeros de clase se han distrubuído entre los diferentes estereotipos. Los estirados que trabajan en bancos o cajas, los aburridos y cuadriculados contables y asesores, los gestores e inspectores que acojonan a todo el que osa ponerse en su camino, los crueles y postizos hijos del márketing y publicidad, los hiper-mega-chachis que se han arriesgado a la rama del comercio & publicidad on line... Pero, ¿y esta nueva generación?
Cuando entré en esta carrera, evidentemente no era como soy ahora, es decir, lo que me ha aportado no han sido sólo conocimientos, sino también un modo de trabajo, y un modo de pensar y ser. Sí, quizás mi predisposición o mi forma de ser al principio han condicionado que acabe donde he acabado y lo que he acabado siendo, una aburrida contable, más o menos, pero, ¿es cierto eso de que el hábito hace al monje? Es decir, ¿que yo eligiese la contabilidad me ha hecho ser aburrida y coñazo? Porque la verdad es que, con estas nuevas generaciones, no veo tan claro que sigan en pie esos estereotipos, más bien creo que se convertirá todo en una masa homogénea y amorfa de "oseas" y "Ey, nena" que no haya absorvido ni un ápice de conocimiento ni modus operandi, sin rasgos distintivos de personalidad propia ni ideas o inclinaciones de ningún tipo. Evidentemente, estoy generalizando, siempre hay excepciones.
Entonces, ¿el hábito hace al monje? ¿O el monje nace monje desde un principio?
28 agosto 2010 | By: Denebola

Yo y el mundo

Una de las cosas que nos diferencia de los animales es nuestra libertad para poder elegir y ser conscientes de ella, de que estamos eligiendo racionalmente un camino. El libre albedrío. Porque, en realidad, somos libres para elegir, sino, no habría decisiones en nuestra vida, sería todo un camino unidireccional. Desde el momento en que nos despertamos, estamos tomando decisiones. Probablemente nos despierte un despertador para ir a trabajar, porque es lo que tenemos o debemos hacer, pero la elección de levantarnos e ir al trabajo, es nuestra. También podríamos quedarnos en la cama y no ir al trabajo, pero no lo hacemos porque eso implicaría unas consecuencias y una responsabilidad que no queremos asumir. Todo acto de elección implica unas consecuencias, se abre un nuevo camino por el que hemos decidido seguir y sobre nosotros recae la responsabilidad de haber tomado esa decisión, porque, afortunadamente, no estamos solos en este mundo, estamos rodeados de personas que también tienen la misma capacidad de decisión que nosotros y a los cuales pueden afectar decisiones que hemos tomado nosotros.
Sin embargo, el ser humano es tan ingrato, que no sabe disfrutar de la elección que ha tomado. O debería decir sabemos, mejor.
Me refiero a que no somos capaces de ver el lado bueno de todo lo que hacemos, siempre vemos el coste de oportunidad, lo que hemos dejado de hacer para tomar un camino. Estamos contínuamente martirizándonos por lo que pudimos hacer y no hemos hecho sin valorar lo que tenemos, y esque, estamos tan acostumbrados a decidir, que no le damos el valor que tienen a las cosas que nos rodean. Tan sólo las valoramos cuando ya no las tenemos, cuando las perdemos. Siempre estamos mirando hacia lo que no podemos tener. ¿Por qué no podemos mirar lo que nos rodea a cada instante como si fuera la primera vez que lo vemos? ¿Por monotonía? ¿Porque pensamos que siempre va a estar ahí para nosotros? Un día dejaremos la tan odiada facultad y dejaremos de ver a mucha de la gente que nos rodea. Un día nos mudaremos de casa y dejaremos de tener ese increíble parque al que salimos a correr todas las mañanas. Un día se nos estropeará la Play 3 y ya no podremos arreglarla ni comprar otra igual.
Sería increíble mirarlo todo como un bebé que se mira las manos maravillado, como si fuera algo increíble, porque no sabe que esas cositas enanas llenas de dedos que se mueven forman parte de él.
Aún recuerdo aquella vez que me estaba maquillando delante del espejo y alguien se quedó mirándome como si eso que para mí era lo más normal del mundo fuera algo increíble.
Así me gustaría a mí mirar siempre el mundo, como si fuera la primera vez que lo viera.
25 agosto 2010 | By: Denebola

Gloriosas excepciones pt.2

Ingeniero informático, cosecha del 79, en 2005 tuvo la oportunidad de su vida, laboralmente hablando, pero fuera de España, así que tuvo que elegir entre su chica, o una oportunidad de trabajo que nunca más se le volvería a presentar. Y eligió a la chica. Se fue a vivir con ella a Barcelona y fueron felices, y comieron perdices... Durante 2 años. Ella le echaba en cara que no traía suficiente dinero a casa, y él que se había quedado en España por ella, así que, perdonen la expresión, todo se fue a la mierda. Se quedó sin trabajo, sin chica, sin piso, sin nada.

Hay que joderse...

Ese fue el resumen de su vida cuando lo ví en la cena de mayo de EGB. Una lástima, me habría gustado que le fuera bien... Pero, en fin, ahora, no tiene chica, pero no puede decir que le haya ido mal desde aquello... No se le ha vuelto a presentar una oportunidad como aquélla, pero ha tenido otras. Y créanme cuando les digo que las ha aprovechado muy bien, en todos los sentidos.

Es una persona a la que la vida no ha tratado muy bien, pero esque él tampoco, y la ha exprimido todo lo que ha podido, quizás demasiado. Para que se hagan una idea, en esa cena, 90% mujeres, sólo otra chica y yo no habíamos pasado por sus "garras"... Curioso.

La verdad es que, sin él, mi infancia habría sido aburrida. Se cruzó en mi vida en 3º EGB, repetidor que venía de otra ciudad, un auténtico trasto, pululó por todas las mesas de la clase hasta que encontraron un compañero de clase que le aguantara. Osea, yo, última fila, en el centro de clase. Y ahí empezó la juerga; él me mangaba el desayuno en el patio y yo le daba collejas; en 3º lo sacaron de las orejas de clase hasta hacerle sangre por llamar cerdo y dictador al tutor, y no se crean que fue su madre a protestar, no, fue él, representándose a sí mismo, amenazando con denunciar... Con un par. En 4º él se ocupó de organizar un "grupo de seguimiento" a la sustituta de la tutora porque 'esas minifaldas no son normales, ésta esconde algo', y ya se ocupó de que todo el colegio supiera que la muchacha en cuestión, al salir del colegio, se iba a un club de streap-tease a "trabajar". La sustituta-prostituta... Ni qué decir que la muchacha dimitió. Claro, que con el siguiente sustituto no le salió tan bien: no sólo acabó con su mesa al lado del profesor, sino que acabó dando él la tan temida lección de la reproducción, por listo. Sencillamente glorioso... En 5º, después de que el estirado de naturales nos castigase a los 2 en el pasillo y dañara su orgullo, decidió aplicar la misma filosofía que había aplicado el profesor con él: como él decía, "tenía la obligación moral de guiar en el conocimiento", así que decidió dar ejemplo, y guió a su mujer en el conocimiento de que su marido tenía otra. En 6º, después de todo un curso riéndonos a costa del acento gallego de la de inglés y su peculiar pronunciación (aún recuerdo aquello de "No se dice mondei, se dice mondi"...................), al suspenderle a final de curso, cuando pasó la profesora por debajo de su casa, la llamó hija de puta y le tiró el cubo de basura por encima...

Como ven, una pieza de coleccionista.

Luego se reformó, y hasta parece un chico normal, educadísimo, el yerno que toda madre querría tener... Pero yo sé que aún sigue llevando en su interior al bicho que era de pequeño.
18 agosto 2010 | By: Denebola

El primero y el último

Pan de nueces con mermelada de cerezas. Es una buena cena... Aunque quizás sería mejor desayuno. Quizás no, seguro.
Desde aquí veo la calle, no hay ni un alma. Es demasiado tarde, todo el mundo duerme y yo debería estar haciendo lo mismo, pero esque no puedo, hoy todavía tengo esa sensación que lo va devorando todo por dentro y sé que puedo echarme a llorar en cualquier momento, no me apetece cerrar los ojos... Aún. Por eso me he acercado a la ventana y he buscado una postura cómoda aquí en el suelo; quizás la tranquilidad de la calle me contagie algo.
En realidad, no pienso en nada, o eso busco, porque es inevitable, mi mente va irremediablemente en una dirección, una dirección que me gusta, pero entonces empiezo a hacerme preguntas que no puedo contestar, y esa nada que va tirando de mí desde dentro, se acelera. Necesito llegar a esa conclusión que me hace sonreír y termina de un plumazo con los fantasmas que crecen en silencio en mi interior, no es la primera vez que me acerco a la ventana, ya sé cómo funciona esto, ya sé cómo funciono yo, pero esta vez parece que tarda más en llegar.

Las sábanas se me pegan al cuerpo y el pelo me pica en la espalda, sin embargo, no hace calor. Al contrario, el aire entra sin miramientos por las rendijas de mi persiana, pero no dejo de dar vueltas en la cama a pesar de que el sueño me vence, y el cuerpo se ha rendido ya a la fuerza de la gravedad, que ahora es mucho más fuerte que yo... Y no sé por qué. Y no sé por qué, me giro hacia la izquierda y mi mirada va directamente hacia esa foto, como si tirase de mí, y no puedo dejar de mirarla, porque aunque mi habitación está oscura, la veo y la recorro lentamente, la conozco como si fuera la palma de mi mano. ¿Cuántas veces la habré mirado? Me encanta...
Y vuelves a ser, como cada noche, el último pensamiento lúcido de mi mente.
Y también el primero de cada mañana. Pero creo que hasta en mi subconsciente estás presente, porque me he despertado tranquila y sonriendo. Esa conclusión que esperaba anoche ha debido llegar en alguno de mis sueños...
16 agosto 2010 | By: URAPlay

Se terminó

Tengo que ponerme serio y decirlo... Se terminó la buena vida de un trabajador en vacaciones. Me cago en la leche. Menos mal que aun queda este mes de jornada intensiva, 6 horas y a casa... Y sí, hoy estoy "matao".

Entre el volver a madrugar, con su ducha temprana (que quieran o no, sienta genial), que no hacía mucho calor, el volver a ver a mis "compis" de viaje, según los cuales no, no tengo cara de síndrome post-vacacional... Aunque uno ha cambiado de opinión al ver mi cara al bajar del transporte... Qué sí, ha vuelto a subir... Cada vez cuestan más los bonos, pero siguen siendo más baratos que la gasolina.

Y sí, yo que vuelvo al curro, "mis" 4 cafeterías de "confianza" que se han largado al monte y a la playa. Y los otros 3 bares, también. Quejas y más quejas, a que mola. Sus jodéis. Pero bueno, vacaciones pasadas, trabajadas, cansadas... Y aun queda trabajo por hacer, tanto en casa como en la huerta. Y joder, lo peor de todo? Trabajar? No... Madrugar? No... Llegar a casa y un.. ah si, que vienes a comer...? No... Lo peor de todo es volver a ir con zapatos. 3 semanas de pies enchancletados, descalzos... Ha sido un martirio.

Veis? Los japoneses, tienes sus chanclas de madera que hacen ruidos graciosos al andar... Y es algo formal!!! Y si no lo es, me la pela. Pero coño, que es verano... Ver a gente con traje da calor a uno, pobres personas... Y ya está.

Solo me quedan decir dos cosas. Una es que sí, me acabo de duchar y tengo el pelo buaaaaaaah, extrasuave, superbonito y la mar de fresquito. Y la segunda, que puede leerlo cualquier persona excepto el señor Piromano (si lo dejamos dentro del grupo de personas... Porque nadie en su sano juicio abandona el bar de Pepe para ir a la taberna de Bill).... Pues sí, que te quiero cosita. Y sí, es a ti.

Play
13 agosto 2010 | By: Denebola

Fingir

El fin de semana pasado tocaba cena en casa de mi angelito. Después de la cena, y con el cubata delante, nos dedicamos a buscar una cadena en la TV (afortunada ella, que tiene uno de esos canales de pago) para pasar el rato echándonos unas risas. Cuál fue nuestra suerte que nos cruzamos con un programa llamado "Sex Inspectors". No sé si lo habrán visto alguna vez, yo no sabía ni de su existencia, el caso es que, por supuesto, lo dejamos en el mencionado programa. Se trata de un equipo de expertos sexólogos (que no putas y chulos, todo hay que aclararlo) que se dedican a solucionar los problemas de sexo con los que acuden al programa una serie de pobres pardillos, claro está, con 'licencia' para verles en vivo y en directo en plena faena.
La chiquilla en cuestión que había en la pantalla tenía un problema, un grave problema: desde que estaba con su actual pareja, no había sentido ni un mísero orgasmo, y llevaba 18 meses fingiendo. Sí, 18. La misma cara que se le quedó al pobre diablo, se nos quedó a nosotras.
Para empezar, yo ya me pregunto cómo se puede estar con alguien y no tener la suficiente confianza como para decir que no te has corrido, hablando mal y pronto. Para seguir, lo que ya no entiendo es cómo se puede estar año y medio fingiendo que te lo estás pasando 'chupi' en la cama con alguien, que ya tiene bemoles el asunto, y, lo peor de todo, que el pobre chico ni se entere...
Y digo yo: ¿si se lo hubiera dicho la primera vez en lugar de fingir, le habría pasado una segunda vez? Porque fingir año y medio, no es fingir, es mentir con premeditación y alevosía.
El caso es que la chica en cuestión había llegado a tal obsesión con el tema, que ya, cada vez que se metían en faena, era un desastre. Imagínense por un momento a la chica desesperada por llegar al orgasmo, y al pobre chico sufriendo lo que no está escrito por que la muchacha disfrutase tan sólo un segundo. Pero, ¿¡cómo va a disfrutar, por Fary!? Se supone que el sexo es sinónimo de placer, no de tortura, ¿tan importante es llegar o no llegar? Cuando estás con alguien en la cama, se supone que te atrae, que le deseas, haces y deshaces por ver a la otra persona pasárselo bien contigo, y no al revés, estar pendiente de lo bien o mal que te lo estás pasando tú.
¿Qué quieren que les diga? Meterte entre las sábanas con alguien y tener una obligación que cumplir, no me cabe en la cabeza.
Ni qué decir tiene que no lo vimos entero, era un rollo. ¿Conseguiría su orgasmo? No lo sé. Lo que sí sé es que se merecía que la dejasen a medias... Durante año y medio.
11 agosto 2010 | By: Denebola

Gloriosas excepciones pt. I

Estos días de verano, la mejor hora para mí son las 8 de la mañana. ¿Quién me iba a decir que yo diría una cosa así? Pues sí, lo es, la ducha me sienta de vicio después de salir a correr y, cuando salgo, todos están durmiendo y lo único que siento es una tranquilidad absoluta y el olor a café recién hecho inundando la casa. Eso y un cigarro, el momento perfecto.



Al hilo de lo que escribí ayer, hoy, mientras corría, me ha venido una persona a la cabeza, una gloriosa excepción a la que quiero mucho y de quien me acuerdo menos de lo que debería.
Anoche supe de él, y hoy no he podido más que recordar. Aún no entiendo cómo nos podemos llevar tan bien, aún se me llevan los demonios al pensar en su santa pachorra, y eso que yo no es que sea la persona más activa del mundo. "¡EH! Con calma...", era su frase, y esque, su mundo giraba muchísimo más despacio que el de los demás, y lo de las prisas nunca ha ido con él.
Nunca bajaba a la hora para ir a la playa a jugar a voley, nunca tenía ninguna preocupación, una persona feliz y despreocupada por naturaleza, aunque, si había que tomar partido en cualquier asunto, tampoco tenía ningún problema.
Un ser peculiar e intrigante. También desesperante, todo hay que decirlo.
Con él pasé mi último día en Salou, antes de venir a Zaragoza, hasta las 11:30 de la noche en la piscina, hablando. Estaba acojonada, y lo cierto es que, de no haber sido por su alma tranquila, me habría dado un ataque de nervios.
Le dije que ni se le ocurriese acercarse al bus al día siguiente, odio las despedidas, pero hizo lo que le dio la gana: se llevó a todo el equipo de voley playa, y me hizo bajar del autobús para despedirme. En su momento, le habría cogido del pescuezo (si llegase, claro), hoy se lo agradezco.
Es esa clase de persona a la que te gusta tener siempre cerca porque, aunque es un vago indecente, es una de las mejores personas que conozco.
¿Qué se puede decir de una persona que lleva 1 año trabajando en Francia y lo único que de verdad le duele es no tener cerca a su novia? Pues que es una gloriosa excepción. Y que me alegro de que se haya cruzado en mi vida.
Estoy deseando que vuelva para cobrarme unas cervezas... Sí, bueno, también me apetece verle.
10 agosto 2010 | By: URAPlay

Pobre niña...


Ha pillado a sus padres montándoselo
Cargado por vsblog. - Vídeos de amigos y familia de todo el mundo.

¡Gracias, gloriosas excepciones!

Llevaba varios días con la intención de escribir sobre otra cosa, pero, sinceramente, no tengo el ánimo como para contarles lo que iba a contar. De hecho, no llevaba ánimo para contar nada, pero, como cada día después de subir de correr, tengo el ánimo bastante mejor, y ahora en lugar de preocuparme, la cuestión me quema por dentro y he decidido compartirla con los que quiera que me lean.
De momento, les dejo la última canción que ha sonado en mi iPod.



Lo cierto es que llevo un par de fines de semana en los que al sector masculino deben estar hirviéndoles las hormonas, porque de otro modo no entiendo el comportamiento que se gastan.
No se equivoquen, salidos con ganas de echar un polvo a toda costa y con cualquiera que se le cruce hay todos los fines de semana del año, y con ese tipo de gente sé lidiar perfectamente, lo que me descoloca los esquemas es que actúen del mimso modo amigos míos, que si lo hicieran con la primera chica que se les cruza, la explicación es fácil, otro salido más, aunque, por gracia o por desgracia, amigo mío, pero no es así, han actuado así conmigo.
Y oigan, como dice una amiga, "mí no entender"...
El primero, porque tiene una señora novia con la que ya convive, y no entiendo de la necesidad de mirarme con cara de cordero degollado y otra serie de cosas, y el segundo, porque ya obtuvo una negativa mía hace ya un par de meses.
El caso es que los 2 tienen un punto común: en el momento en que supieron que nunca les iba a mirar como ellos querían, en el momento en que supieron que son invisibles y asexuales para mí porque sólo hay una persona en mi mente a la que puedo mirar así, lo intentan aún con más fuerza.
Es como si el hecho de no estar disponible haga aumentar mi atractivo exponencialmente. Joder, ¿sabrán lo que es la autoestima?
Lo que realmente me molesta no es eso, sino que son mis amigos. O por lo menos, lo eran. Y a ellos el concepto amistad parece que se la trae bastante al pairo cuando de echar un polvo se trata, porque eso es lo único que buscan. Cuando yo les tenía en cierta estima, a mí ellos no me diferenciaban de cualquier mujer que tuviera alrededor.

Me viene una frase a la cabeza: "Un hombre y una mujer no pueden ser amigos". Desde luego, de estos energúmenos, no, está claro; menos mal que aún me quedan un par de ejemplos para combatir ese argumento, sino, sería muy triste...
A lo que no dejo de darle vueltas es a la cuestión de por qué el hecho de volverse inalcanzable hace que seas un objetivo tan "jugoso" como para que te dé igual que se rompa la relación que tienes con esa persona, o, por ejemplo, la relación que tienes con tu novia (o por lo menos, arriesgarla). Después de esto, no puedo decir que, en general, los hombres piensen con el cerebro... Menos mal que hay gloriosas excepciones.
03 agosto 2010 | By: URAPlay

Cazurros y paletos al mando

Soy rojo, para lo bueno y lo malo. Me parece bien eso de quitar la prestación del paro a quien no quiera trabajar. La chusma, mejor muerta y bajo tierra... O incinerada, que de lo que se siembra se planta...


El de trabajo plantea quitar el paro a quien rechace las ofertas de trabajo que se dan en el paro. Me parece bien, no va a solucionar casi nada, pero si va a hacer que trabajen cuando se les llama. Obviamente, hay casos de todos los tipos, pero rechazar 5 ofertas en un año para cobrar el paro, mientras no se hace nada de provecho... A la mierda. No es un lumbreras el ministro, pero tiene más luces que otros de sus compañeros.

La... ministra/cazurra de cultura, cateta donde las haya, creadora de bazofia cultural, defendió que Saw VI fuera calificada como película X, por sus escenas de violencia, sangre etc... Y no se pudiera estrenar en este país tal y como pasó en otros países bastante más... Modernos? Avanzados? No tan catetos?

Eso pasó el año pasado creo, el otoño. Después de defender eso, que una ficción salvaje, violenta y sangrienta no se pudiera en salas comerciales, califica de cultura asesinar animales en plazas... No hará falta decir que la ficción es censurable, que la realidad es otra cosa. En la ficción no muere nadie, ves tomas falsas de cosas de miedo e incluso se ríen. En la realidad, ya ves. La gente se ríe, aplaude la tortura, grita muerte a un animal cuyo único delito ha sido nacer.

No, no soy partidario de terminar con la fiesta. Con 4 cambios es suficiente. Ni tortura, ni asesinato. Torea al toro, pero sin clavar banderillas. Ni matarlo en la plaza, no cortar la oreja. Tan difícil es torear a un toro con unas condiciones perfectas? Pues... No torees. Y claro, nada de toros a la medida del torero. Los toros buenos, de cuerno ancho, largo y delgado. Sin tortura, animal contra persona. En 4 años, no quedan toreros. Se termina la fiesta, se termina las anormales que viven de los toreros, como la B.E. El país se moderniza, se hace menos cruel y telecinco cierra por quiebra. Que más se puede pedir?

Subiendo el nivel de frikismo

Si el señor Piromano no sale de su escondite después de esta foto...

Star wars

A París, por favor.

No puedo dormir. No es por el calor, que lo hace, pero corre el aire, aquí siempre corre el aire, y como no paraba de dar vueltas en la cama, he hecho una visita al frigorífico y me he salido a la terraza.
Noche de verano, aire fresquito, la botella de yogur de piña (no, no me apetecía una cervecita fría), la luna en cuarto menguante y yo acurrucada en la silla de la terraza, nadie más. Ni un alma, ni un ruido. Nada.
Me gusta más cuando la luna está llena, pero no se puede pedir todo. Supongo...
Ni siquiera sé el tiempo que he estado ahí fuera dejando que el viento se llevase lo que quiera que fuese que me quitaba el sueño, ni si se lo ha llevado.
Me he preguntado qué estaría haciendo en ese preciso momento. Realmente me gustaría verle, me gustaría tener una de esas pantallas gigantes a lo Minority Report y poder verle.
Me lo he preguntado tantísimas veces...
La mayoría de la gente que conozco sólo piensa en ti cuando te tienen delante, no eres más que una piedra en su camino que algún día dejará de estar. Al fin y al cabo, ¿cuánta gente a mi alrededor se habrá percatado de que estoy aquí fuera, en silencio, mirando un cielo oscuro y estrellado? ¿Cuánta gente estaría pensando en mí en ese preciso momento? Probablemente nadie. Todos estarán durmiendo para ir mañana a trabajar, o en cualquier sitio perdidos, de vacaciones.
Todos tenemos obligaciones que ocupan nuestra mente la mayoría de nuestro tiempo, no tenemos tiempo de pararnos a pensar en nadie, y no nos damos cuenta de que, sin querer, nosotros también dejamos una huella en la vida de los demás, por pequeña que sea. A veces es tan pequeña que acabamos siendo un recuerdo sin cara ni nombre, alguien a quien la memoria ha ido borrando porque no somos tan importantes.
Y yo no dejo de preguntarme qué estará haciendo en estos precisos momentos... Y sonrío, porque me lo imagino hablando con alguien, con esa media sonrisa que sólo tiene él. Porque no es un recuerdo borroso. Nunca será así.
Es sólo que le echo de menos de una forma que no sabía ni siquiera que existía. Bueno, eso, y que en lugar de estar sola en mi terraza mirando la luna con una botella de yogur de piña, me gustaría estar en otro sitio... En Paris, en le champ de mars, por ejemplo...