29 diciembre 2010 | By: Denebola

Sueña conmigo

No estoy muy segura de qué secuencia de acontecimientos nos llevaron allí, sólo recuerdo un garito enorme que me resultaba familiar, pero en realidad no lo era, muchas caras que me eran conocidas, pero en realidad no recuerdo ninguna porque no lo eran, unas gradas, matorrales, hierbajos, y encontrarnos con mi hermana en lo que se suponía que era la casa de mi abuela con más gente, como atemorizados, huyendo o escondiéndose. Entonces apareció aquella loca. Llevaba un arma, pero no sabría decir de qué tipo era, parecía más sacada de Minority Report que de la vida real, y nadie le contrariaba ni le levantaba la voz. Nos sacó a la calle y nos puso en 2 filas de espaldas a cada fachada. Podía ver a mi hermana en frente, y él aún me llevaba cogida de la mano izquierda. Lo cierto es que no entendía nada hasta que ví unos puntitos rojos en la frente y en el pecho de mi hermana, pululando, y también estaban en mi cuerpo y en el de todos. Cuando levanté la vista comprendí que íbamos a morir viendo la cara del maldito hijo de puta que nos iba a disparar. Bueno, eso de cara era mucho decir, unas Ray-Ban y un gorro negro era todo lo que veía detrás del cañón que me apuntaba. Por más que miraba a mi alrededor, no veía cómo escapar de allí. Algo subía por la pared, lo notaba en la espalda, quizás una rata, pero me daba iguall, yo sólo quería salir de allí y no veía cómo. Fue entonces cuando me dió el ataque de pánico. Sabía que no era el mejor momento para perder los nervios y que no iba a arreglar nada, pero eso no se puede controlar, sólo pensaba en que todo podía terminar ahí mismo. Comencé a gritar como si me fuera la vida en ello, que en realidad, así era, o eso pensaba yo, pero no me oía, sólo escuchaba los latidos de mi corazón retumbar en mi cabeza con una fuerza y a una velocidad demencial.
Y así era, lo primero que recuerdo al tomar conciencia de dónde estaba es eso, los latidos de mi corazón desbocado por el realismo de un sueño que ojalá no hubiera tenido nunca. Aunque en realidad no es la primera vez que sueño que me matan. Recuerdo un sueño muy claramente; aunque sé que ha habido más, no los recuerdo. Me perseguía por algún local a oscuras, no recuerdo que me resultase familiar, sólo escuchaba sus pasos, corría detrás de mí. Posiblemente estuviera cansada, pero el miedo lo ocultaba todo. Vi la luz de un ascensor y corrí hacia allí, pero tropecé en la puerta, y cuando me dí la vuelta para levantarme y darle a cualquier botón, lo ví encima de mí, le ví la cara, ví el puñal clavándose en mi carne, a la derecha de mi cacabel. Esa vez me despertaron mis propios gritos.
Lo curioso de esos sueños es que, a pesar de todo, al despertarme no hay sensación de miedo, ni de angustia.
Y como pensaba que algo aquí arriba en mi azotea no funcionaba bien, me he dedicado a indagar con ayuda de una amiga licenciada en psicología.
¿Sabían que soñar que uno mismo muere o va a morir significa que una etapa se cierra en su vida y comienza una nueva muy positiva? Tiene su lógica, supongo, aunque no deja de parecerme sorprendente. ¿Y que soñar que uno es asesinado se asocia con enemigos o personas que quieren hacerle daño? ¿O que ver al asesino en sueños significa que hay algo que precisa ser resuelto cuanto antes?¿Y que si es herido con un arma blanca en sueños, significa que se siente traicionado, un apuñalamiento, una lucha de poder, y un puñal, una sorpresa positiva? Realmente no me sorprende nada de lo que me dijo, supongo que lo único que tiene mi azotea son problemas a los que les da demasiadas vueltas, nada más, porque tiene sentido (bueno, menos lo de la sorpresa, que aún la estoy esperando).
Es curioso, la última vez que recurrí a ella por algo así fue hace 5 años, cuando soñé que se me caían los dientes. Es realmente angustiante. "Tienes limitaciones, hay algo que te está limitando y te hace sentir encerrada". Hay que joderse, por aquél entonces, ni siquiera quería verlo, pero era cierto, tenía nombres y apellidos y salíamos juntos.
Es curioso, el subconsciente nos muestra todo lo que no surge a la superficie de un modo extraño, en un lenguaje muy poco directo, pero no por eso deja de tener razón...

¿Han tenido alguna vez uno de esos típicos sueños?