No he sido una niña buena... Nunca lo he sido. Desde que era una renacuaja con apenas consciencia de lo que ocuría a mi alrededor, he sido una niña mala y traviesa y me habéis traído carbón (qué rico, por cierto...).
A pesar de ser la luz y la oscuridad, la noche y el día, el sol y la luna, a pesar de llevarnos a matar, la he querido siempre. A nuestra manera, nos queremos. No podría concebir mi casa siendo la Casa de la Pradera. Las discusiones nos preceden y a pesar de ello, ahí estamos, la una al lado de la otra a pesar de la distancia.
Aún recuerdo cómo la miraba en la cuna cuando era apenas un bebé durante horas... Me encantaba mirarla, y años después cogerla y estar con ella.
Hoy sólo os pido 3 cosas para mí.
Ya sabéis cuáles son.
Una es laboral.
Otra es de crecimiento interno.
La otra... La otra es imposible.
Como el trabajo es arduo, escribo pronto, con tiempo. Aunque la esperanza es más bien poca. Sólo pido un pedazo de felicidad. Odio la Navidad, ya sabéis por qué... Pero en el fondo sigo siendo una nena... I suppose.
La Ñeka.
4 comentarios:
Me has quitado la idea de la cabeza para mi post de mañana... joder!!! XD
las grandes mentes piensan igual? XD
Pues alargue el post... El blog es suyo, playmobil!!
Es nuestro, "querida".
Yo también pedí 3 cosas, en mi carta personal, y me atrevería a decir que dos de las tres son imposibles, pero qué es la vida, si no soñar, querida dene? O qué es una hermana, si no es discusión tras discusión? Me ha recordado a mí misma con mi hermana, jaja
Por cierto, se os echa de menos.
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