Pero últimamente, y por motivos que ni siquiera me voy a detener a explicar, son los gatos grandes los que están despertando aún más mi curiosidad.
Los gatos domésticos siempre me han parecido una paradoja en sí misma, porque, aunque domesticados, siguen siendo salvajes, y quien diga que tiene domado a un gato es bastante ingenuo, porque por muy dóciles que sean, estos pequeños mininos sólo responden a su instinto, no a su amo. Los humanos sólo somos su fuente segura de alimento y proveedores de un entorno cálido y relativamente seguro para ellos; ésa es la única lealtad que tienen respecto a nosotros, porque si les abandonáramos, seguirían sabiendo valerse por sí mismos del mismo modo o quizás mejor que a nuestro lado.
¿Quién no ha visto a un gato pasearse por alguna estantería sin tirar ni una sola de esas figuritas tan sumamente frágiles? ¿Quién no lleva ni un sólo arañazo de su gato? ¿Quién no deja de acojonarse cuando va a casa de algún amigo cuyo gato le tiene ojeriza? ¿Y eso les parece señal de domesticación? A diferencia de los canes, la lealtad de un felino siempre está consigo mismo antes que con su amo. Su relación con la especie humana es más un tratado de paz y convivencia que una domesticación.
Y el máximo exponente de todo esto, son los felinos salvajes. En estos casos, ese tratado de paz con los humanos es mera ciencia ficción. No sé ustedes, pero si yo fuera cuidadora de un zoo, no les tocaría ni con un palo, que más letal que un felino, pocas cosas hay.
Rápidos, gráciles, curiosos, observadores, desconfiados, pacientes... Instintos puros y duros.
Les dejo unas cuantas imágenes para que se deleiten con estos "animalitos".
LEOPARDO- Se diferencia del Jaguar en su menor tamaño, sobre todo, del cráneo, en las marcas del pelaje, ligeramente distintas, y que vive en manadas. ¿Sabían que comen cerdos y monos? |
PANTERA BLANCA- Lo adivinan, ¿no? Es un leopardo, jaguar o puma albino. Aunque el albinismo puede darse también en leones y otros mininos. |
PUMA- ¿Sabían que tiene 5 garras en las patas delanteras y 4 en las patas traseras? ¿Y que a diferencia de sus "hermanitos", los gatos grandes, éste ronronea? |
Y hasta aquí puedo leer. No, no me he olvidado del guepardo y otros mininos famosos, sólo les he hablado del géreno Panthera (dentro de la subfamilia de los panterinos) y he incluído al Puma, ya que lo he nombrado al hablar de la Pantera Blanca.
¿No son adorablemente intimidantes? No creo que la curiosidad mate al gato en estos casos...